Desde siempre, las noticias se han dado a conocer por medio de heraldos, que es el nombre que se le brinda a quien notifica, que quiere decir hacer saber, por notus y facere.
El primero, según los dioses del Olimpo, fue Hermes o Mercurio, que inventó la lira y de ahí que los músicos lo tengan en muy alta estima.
Hermes o Mercurio, ha sido desde hace mucho, el nombre que se le da a los encargados de dar las noticias y por mucho tiempo, una vez que los juglares pasaron al desuso por la aparición de los medios escritos de comunicación, fueron los periódicos los principales portadores de la información a la gente.
Uno de los defectos del periódico era que la noticia se conocía hasta el día siguiente, por la necesidad de elaborar el formato del mismo y por ende, había veces en que llegaba con evidente retraso.
Sin embargo, cuando a mediados del siglo pasado se popularizó la “caja idiota” o televisión, empezó a existir la noticia “en tiempo real”, es decir, la posibilidad de que el público se enterara al mismo tiempo de que sucedía la noticia. Empero, no había manera de que hubiera una respuesta inmediata de la audiencia, pues no existía la forma de comunicarse con los demás.
Ahora, la red de redes o internet ofrece la posibilidad, vía los cuartos de contacto o chat rooms, de que lo que una persona o medio publica en su página o en una red social, de inmediato sea retransmitido a todos los demás participantes, agregando cada uno su propio comentario, lo que da la posibilidad de que lo que se origina como noticia, llegue un momento después, ya con comentarios, al destinatario que es capaz de, a su vez, retransmitir la información con su propio agregado.
Ahora, lo que empezó siendo un juego para ver qué ropa usas, a qué fiestas fuiste, cuándo cambias tu coche y demás banalidades, se ha convertido, de pronto, en el principal y durísimo crítico de los gobiernos a lo largo y ancho del orbe, pues si el dictador de tal o cual país, comete un delito u obra en contra de los intereses de su pueblo, a pesar de las restricciones que los mismos gobiernos han implementado en los contenidos a publicar en la red, lo cierto en que nunca fue tan fácil burlar los filtros de los controles de seguridad, pues existen múltiples formas para hacer saber lo que en alguna parte sucede y que ha de interesarle a todo el universo.
Los partidos políticos… esos entes jurídicos que según son del pueblo pero que se apartan cada día más de su razón de ser, ahora empiezan a ver con miedo, con recelo, los intentos de los ciudadanos libres, de los que se niegan a someterse al control de una persona moral ajena a ellos mismos y que además, sea cual sea su color o ideología o ubicación en la geometría política, actúan en contra de los intereses de los pobladores de un país, ahora ya empiezan a buscar la forma de acercarse a los chat’s.
Pero vaya que los ciudadanos libres ya están prevenidos y por ende, le niegan al gobierno y a las formas organizadas, cualquier intento de acercarse y mezclarse con quienes ahora se enarbolan como los próximos paladines de la libertad.
Se han ido creando medios que abren sus espacios a voces disidentes, a voces contrarias, a voces alternas, vamos, se ha producido el libre juego de las ideas y del flujo de la información sin cortapisas, a grado tal, que ya no existe la forma de parar la comunicación vía internet, que ha resultado ser una forma alterna de notificar, con lujo de detalles y sin censura, unos ciudadanos a otros, de lo que a todos afecta.
Ahora bien, si lo que se esparce en la “blogósfera” es una forma de atender un infarto cuando se va solo, o la manera de reaccionar ante un ataque cerebral o muchos otros mensajes que todos hemos recibido varias veces, está bien. No existe ataque a persona o institución alguna. Pero, cuando lo que se recibe es una invitación a acudir a tal o cual lugar a protestar en contra del alza de precio de la luz o por que subieron los impuestos o no quieren soltar a un detenido o cosas así, el gobierno ha de empezar a darse cuenta que cada día más, la sociedad está comunicada y que no existe ya, la forma tan artera de darle atole con el dedo a la población.
Que a pesar de que el gobierno o más bien, los diversos gobiernos, manejan sus presupuestos como la forma de premiar al amigo y castigar al enemigo, lo cierto es que lo único que han logrado es que los medios castigados se salgan de los cauces formales, de la forma impresa y distribuida en las calles y que ahora, como es prohibida y todo lo prohibido es más atractivo, tenga un récord de distribución y por ende, una mayor penetración en la audiencia.
Que si a la gente le da flojera leer algo que está en las calles y que es distribuida como mercancía formal, en cuanto se le dice que está prohibido, se vuelcan al instante a buscar aquello que se les ha retirado.
El mejor ejemplo lo tenemos en la obra de Carlos Fuentes, Aura, la que una vez que fue prohibida y atacada por un funcionario, se acabó en las librerías y la gente la buscó sólo por el morbo de poder leer algo “prohibido”.
Y créame, nada hay que se disfrute más que aquello que nos ha sido vedado.
Y al parecer, los medios alternos están proscritos… y eso, señores, les va a dar mucha más difusión. Y por supuesto, mucha mayor importancia. Créame.
Me gustaría conocer su opinión.
Vale la pena
José Manuel Gómez Porchini.
Comentarios: jmgomezporchini@gmail.com
lunes, 14 de diciembre de 2009
La influencia de los medios alternos de comunicación. MÉXICO DEBE SALIR ADELANTE., de Jose Gomez Porchini
Etiquetas:
Derecho a la Información,
Gómez Porchini,
libertad de expresión
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